29 de octubre de 2020

Al acecho.

El incesante bullicio del tiempo que pasa, tirano e indiferente, 
dibuja en los rostros que conocí emociones que desconocía. 
Incluso a veces, en el reflejo, intenta -logra- confundirme. 

Encuentro mi propia mirada sostenida, 
que inunda de verdad, pupilas y sonrisa.

Suspiros invisibles empañan la visión, 
la difuminan y la mezclan; pasado y presente.
No cambia la imagen, cambia el ser. 

Ya lo dijo Don Juan, 
"en un mundo donde la muerte es el cazador,
no hay tiempo para lamentos ni dudas"

Vuelvo al momento, hago tangible la realidad.
Desempaño las superficies, y veo en presente
el pasado y el futuro. 

Soy uno, de principio a fin.
soy el que era, y seré quien vaya a ser. 

Causa y efecto. 
Todos somos presas de un mismo cazador.
Si no encuentras busca,
si encuentras disfruta. 
No hay tiempo que perder. 

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